The Miedo a la soledad Diaries
Al closing del día, tú solo no puedes solucionar el problema, pero hay algunas maneras en que puedes ofrecer apoyo mientras proteges tus propias necesidades emocionales.
El apoyo emocional es uno de los grandes beneficios de tener relaciones. Cuando enfrentas desafíos de vida o estrés, tus seres queridos pueden ofrecerte comprensión y bienestar escuchando tus problemas y validando tus sentimientos.
La dependencia emocional suele presentar varias fases que se repiten y reiteran de forma cíclica y persistente.
Cuando una persona se encuentra bajo el Handle de la dependencia emocional, piensa que no puede vivir sin esa persona porque está enamorado, pero en realidad, no puede desapegarse de esa persona por miedo a la soledad o al abandono.
Además controla los centros de recompensa y placer del cerebro. Cuando estos centros se activan, pueden afectar el estado de ánimo, las emociones y el estado físico de una persona. La liberación de dopamina conduce los sentimientos de emoción cuando ves o piensas en esa persona que te ha dado vuelta el mundo.
Superar estos obstáculos requiere un esfuerzo consciente por parte de ambos miembros de la pareja, comprometiéndose a cultivar y nutrir el amor verdadero.
La feniletilamina es un neurotransmisor que productor de emociones positivas y placenteras, incluso a veces estas emociones pueden ser tan fuertes que pueden hacer que una persona pierda el apetito.
La culpa: Este caso se da cuando uno no abandona la relación por estar enganchado al sentimiento de culpa. Tiene claro que ya no ama ni quiere estar con su pareja, pero cuando se lo comunica la otra persona adopta el rol de víctima y, de manera automática, el otro se siente culpable y se mantiene en la relación.
Dependencia emocional hijos/as pequeños y padres: Este es el tipo de dependencia emocional más común. Los niños/as deben ser dependientes emocionales de sus click here padres hasta cierto grado. Los padres demasiado protectores pueden acabar dejando demasiados estragos en sus hijos/as.
Baja autoestima: En una relación de dependencia emocional las personas pueden estar sujetas a una devaluación permanente. De hecho, sienten que nunca estarán a la altura de los estándares de la otra persona y hasta piensan que deben cambiar completamente para agradarles más. Cambios en el comportamiento: Una persona dependiente puede cambiar su forma de ser y hasta actuar diferente cuando está con el amigo/a, familiar o pareja. Incluso este enganche emocional puede llegar a hacer que inhiban aspectos fundamentales de su personalidad con tal de ser 'perfectos' para la persona en cuestión. Búsqueda constante de afecto: En una relación de dependencia siempre se buscan signos de afecto del otro/a. Debido a ello pueden padecer de angustia y ansiedad si no se recibe la atención que buscan. Sentimientos de culpa: Cuando la otra persona no está satisfecha o contenta con la relación, muchas personas con dependencia emocional pueden sentir culpabilidad debido a ello. Tanto es así que incluso pueden experimentarlo a causa de un comportamiento de menosprecio e incluso abusivo. Exceso de Command: Las personas con una dependencia afectiva tienen y sienten la necesidad de controlar absolutamente toda la vida de la otra persona. Miedo a la soledad: Obsesionarse con alguien de esta forma también puede provocar que las personas prefieran estar dentro de una relación tóxica en lugar de romper este vínculo, ya que no pueden imaginar su vida sin la otra persona. Estos son algunos de los síntomas que una persona dependiente emocionalmente puede padecer. Si crees que puedes estar en una relación de este tipo, es importante que acudas a un psicólogo/a profesional.
Esta forma de vincularse es poco saludable y afecta el desarrollo y el bienestar emocional y psicológico del dependiente. Veamos algunos de sus síntomas y signos más característicos.
Independencia: El amor verdadero permite a cada individuo tener su propio espacio y crecer como persona. Esta independencia equilibra la intimidad y la individualidad en la relación.
La codependencia ocurre cuando descuidas tus propias necesidades por cuidar de las necesidades de un ser querido.
En cualquier tipo de relación, la dependencia se nota en una serie de síntomas que indican que la persona tienen un apego desproporcionado hacia su pareja, amigo o familiar.